Los precandidatos a gobernador caminan, se juntan, se muestran. Ese emprendimiento surgió luego de que Sergio Urribarri los autorizara. Gustavo Bordet, Adán Bhal y Juan José Bahillo son quienes parecen estar en la línea de fuego. Ninguno de estos tres hombres cree a ciencia cierta que habrá pelea en el oficialismo. Uno de ellos observó ante Página Política que el mismo mandatario ya no hace mención a las internas, aunque los empujó a que salgan a caminar. Punto.

Bordet tiene a su favor ser de Concordia. Parecería un dato menor, pero en la dirigencia se le atribuye esa propiedad. Esa jurisdicción ya no es sólo la capital del citrus, también es la del peronismo. La sangría en el PJ de Paraná se ha encargado de alimentar esa creencia.

El intendente ha hecho equilibrio entre la ansiedad de Enrique Cresto, que pretende sucederlo; y la incógnita candidatura de Mauro Urribarri. Ángel Giano no se ha bajado de esa pelea. Si Bordet es el elegido para suceder a Urribarri, Cresto lo sucede en la Municipalidad. Esa ecuación es la que hacen en el peronismo y entusiasma a todos los muchachos de Concordia. Intendente y senador volvieron a mostrarse con frecuencia en actos. El otro esquema que se baraja es que Cresto acompañe como vice a Bahl. Esa posibilidad ya no contenta a todos.

El jefe comunal de Concordia tuvo encuentros en Paraná, La Paz, Diamante, Gualeguaychú y Colón, entre otros. En algunos lugares fue recibido por sus pares. Algunos hechos de carácter institucional parecieron disparar alguna señal para adentro del gobierno y hacer pensar que sería el elegido. Uno de ellos, por citar un caso, fue el que organizó la Uader en Villaguay y que tuvo a Bordet como invitado especial. Otro: el ministro de Gobierno, Pedro Báez, le presentó en Buenos Aires al embajador cubano en la Argentina, Orestes Pérez Pérez.

Con la figura del concordiense simpatiza José Cáceres, quien junto a Báez y Blanca Osuna, constituyeron un tridente en el fragmentado mapa peronista de esta capital.

Cosechas y promesas

Bahl es parte de esa fractura capitalina, pero a Paraná Campaña lo tiene cerrado. Diputados, senadores, intendentes y vecinalistas lo acompañan y lo manifiestan en los medios de sus pueblos. Tam,bién se han mostrado públicamente. En ese álbum de fotos una muestra a legisladores de Concordia. Ante cualquiera consulta sobre estos encuentros, el funcionario siempre dirá que son por trabajo. Es posible, pero en esta instancia nada es casual.

El ministro llevó a José Allende a Federal y Bóvril, y el fin de semana pasado estuvo en Villaguay con referentes del oficialismo. En el escenario estuvo uno de sus contrincantes, Bahillo. Entre ambos hay buena sintonía. En rigor, también la hay con Bordet.

Bahl cree que uno puede tener cerrado todos los departamentos, pero si Urribarri decide que el candidato es otro no hay mucho más que hablar. Quienes alientan su candidatura se entusiasman con “el armado provincial del Beto”.

El intendente de Gualeguaychú reconoce que corre desde atrás respecto a Bahl y Bordet, pero confía en su fortaleza territorial. Su departamento suele ser campo de grandes batallas por tener a candidatos taquilleros como Alfredo De Angeli o Luis Leissa, que siempre hace ruido. Sin embargo, Bahillo ha logrado imponerse. Su figura –creen cerca de él- suma otro electorado además del votante peronista clásico.

Julio Solanas es el otro competidor. Quizás sea el más desobediente de todos los que pretenden suceder a Urribarri. Rémoras de la época en que lo enfrentó. Consciente de lo que representa en su territorio no dudó en cuestionar el discurso de Osuna. El ex intendente siempre acompañó a la actual presidente municipal pese a algunos desaires que le hizo a su soldado, Gastón Grand. Ha llegado, parece, el tiempo de permitirse algunas quejas.

José Lauritto es otro actor, si se quiere independiente, en todo este elenco. El ministro de Educación quiere volver a la intendencia de Concepción del Uruguay. Según supo Página Política, el funcionario mandó a decir que abandonaría el proyecto departamental si desde Paraná intentan entrometerse en el PJ de Uruguay. Fue una advertencia.

Los legisladores hacen correr una versión: Urribarri les habría prometido que la mayoría repetiría mandato. Se los ve inquietos. Quieren una ratificación.

Sin cronograma electoral, la dirigencia entrerriana se impacienta. Este fin de semana, por lo menos, tendrán otras cuestiones para entretenerse. A Gualeguaychú llegarán más de 300 radicales para decidir si concretan una alianza con Mauricio Macri, Sergio Massa, o con los dos. No es un dato si en esta provincia se vota en octubre.