Rogelio Frigerio presentará la semana que viene el proyecto de reforma política. Será el martes ante representantes de todas las fuerzas, según se adelantó a Página Política.
Básicamente, la iniciativa impulsa la Boleta Única Papel (BUP). En el peronismo hay algunas resistencias, pero una mayoría está de acuerdo con este cambio copernicano en la presentación de candidatos el día de la elección y también en la forma de encarar una campaña. La cara de todos los candidatos en un papel hizo; por ejemplo en Santa Fe, en donde se inspiró el gobierno entrerriano); un número importante de periodistas se convirtieron en candidatos.
Gustavo Bordet había presentado un proyecto en 2018, pero su interna con Sergio Urribarri, que presidía la Cámara de Diputados, puso en dudas la aprobación. En rigor, lo pudo hacer si el puñado de votos que perdía a manos de su antecesor en la Gobernación los buscaba en Cambiemos, donde una mayoría compartía el proyecto. Frigerio hizo lo propio, pero como diputado nacional, pero en un escenario más hostil.
La BUP, entonces, está o estuvo en agenda de las principales coaliciones políticas de la provincia, lo que implica que sobran las posibilidades para que finalmente se apruebe. El Gobernador tiene mayoría en Diputados y en Senado requiere de conseguir una voluntad del peronismo. Una ganga.
La implementación de la BUP implicaría, básicamente, la desaparición de la Ley Castrillón. Esta norma, creada para resolver la interna entre Jorge Busti y Julio Solanas en 2007, perduró casi 20 años y puso al peronismo en un estadío de abulia que solo debía esperar, cada dos años, lo que decidía el gobernador de turno. Durante esos años, sepultar esa ley solo se escuchó en bocas aisladas de dirigentes que supieron tener alguna aspiración provincial.
Hace dos semanas, Rosario Romero le dijo a Página Política que la BUP, efectivamente, echaría por tierra la norma por la cual se organizó el peronismo y cuyo nombre se le debe a su autor: el ex diputado Emilio Castrillón, también ex vocal del Superior Tribunal Justicia (STJ) a instancias de Busti.
“Con la reforma política, y la boleta única, la Ley Castrillón desaparece, además ya cumplió una etapa”, dijo la Intendenta de Paraná, aunque aclaró que no era partidaria de las internas cerradas en los partidos. “Tampoco soy partidaria de eliminar las PASO”, agregó.
Con la BUP no se elimina la lista sábana, que está en la Constitución; sino la boleta sábana. No obstante, un candidato a gobernador seguirá teniendo como exigencia presentar una lista de diputados y senadores.
Sin Ley Castrillón y sin mariscal a la vista, el peronismo suma más incertidumbre para su futuro.
Fuente: Página Política
