La senadora Gladys Domínguez salió al cruce de la Departamental del PJ de Feliciano que, por nota, solicitó la expulsión del partido. Ese organismo lo preside el intendente de la ciudad cabecera, Damián Arévalo.
Se la acusó por sus decisiones legislativas que, según la nota presentada al Consejo Provincial, la “ha convertido en el engranaje necesario para garantizar la impunidad del oficialismo”.
Domínguez envió un derecho a réplica. “Mi compromiso con Feliciano no se mide en comunicados ni en operaciones internas, se mide en gestión y resultados. No acepto que se intente disciplinar con agravios a quien trabaja y da la cara. Eso no califica ni como debate político, es oportunismo”, comenzó diciendo la senadora en el texto enviado a Página Política.
Y enumeró: “Mientras algunos hacen ruido, yo gestiono. Salud, educación, instituciones, caminos rurales y fortalecimiento de las juntas de gobierno del departamento tienen hechos, montos y resultados claros. Becas para más de 300 estudiantes, más de 40 millones para clubes y comparsas, cerca de 950 millones para caminos rurales y avances históricos en jerarquización institucional. La histórica obra del quirófano del hospital. Todo para Feliciano, todo comprobable y a la vista”.
Domínguez defendió los posicionamientos en los que no acompañó al bloque del PJ. “En la Cámara de Senadores no practico obediencia ciega. Acompaño lo que beneficia a Feliciano y marco límites cuando hace falta. La lealtad no es sumisión: es defender a la gente, incluso cuando incómoda”.
Y enseguida se metió con Arévalo, con quien mantiene la interna partidaria. “Con la misma firmeza con la que se me cuestiona, exijo transparencia al Ejecutivo Municipal de Feliciano. Que den explicaciones, exijo que explique cuánto gasta en pauta oficial, cuánto invierte realmente en salud, educación y desarrollo social y qué obras están efectivamente terminadas. Gobernar sin rendir cuentas no es gestión, es relato”, encomió.
Para finalizar, sostuvo: “No me corrí ni un centímetro de mis ideas, ni del mandato que me dio el pueblo. Voy a seguir trabajando por Feliciano, con hechos y sin pedir permiso. El resto es palabrerío, eso se lo dejo a los que no tienen nada que mostrar”.
Fuente: Página Política



