
A las 15.58, la votación nominal del Senado confirmaba que el gobierno de Rogelio Frigerio había ganado la pulseada para disolver el Instituto de Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper) y dar paso a la creación de la Obra Social de Entre Ríos (OSER).
La mayoría peronista en Senado fue quebrada este miércoles gracias a la abstención de las senadoras Gladys Domínguez (Feliciano) y Nancy Miranda (Federal). La votación terminó con ocho votos favorables de la bancada de Juntos por Entre Ríos y la oposición de siete senadores del peronismo, tal como anticipó Página Política.
Mientras en la Plaza Mansilla manifestantes de la Intersindical en Defensa del Iosper expresaban su rotundo rechazo y un fuerte operativo de seguridad rodeó la Casa de Gobierno y las inmediaciones del Senado, el senador José Gustavo Vergara (JxER), presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, defendió el proyecto, asegurando que «no estamos haciendo nada a escondidas de la gente, dialogamos con las instituciones, los sindicatos y los involucrados con la prestación de servicio del Iosper». Justificó la medida haciendo referencia a la deuda del Iosper, que supera los 55 mil millones de pesos, y un déficit de más de 20 mil millones. «El déficit no surge por casualidad, este caso debe ser por desmanejo en la administración, falta de eficacia y efectividad», sentenció, a la vez que negó que la iniciativa busque privatizar la salud.
Por su parte, el senador Rubén Hernán Méndez resaltó que la ley actual del Iosper tiene más de 50 años y que el nuevo proyecto busca «transparentar y que sea mejor para los afiliados», haciendo hincapié en que la OSER será «pública y con autarquía».
Además el senador oficialista Rafael Cavagna defendió el proyecto, asegurando que se hicieron aportes valiosos en las comisiones y que existe un compromiso para implementar cambios.
El resultado de la votación se supo temprano, cuando las dos senadoras anticiparon que se abstendrían. Nancy Miranda, del departamento Federal, rompió el silencio ante los cuestionamientos y mensajes ofensivos que recibió. «Yo no me vendí a Frigerio ni a nadie», afirmó, y cuestionó a sus «compañeros justicialistas» por la derrota electoral: «Si Frigerio está gobernando hagámonos cargo, porque perdimos la provincia por errores nuestros».
En contra del proyecto, el senador Juan Pablo Cosso (Villaguay) criticó la falta de claridad en los informes de la intervención del Iosper y la celeridad con la que se trató la ley. Juan Diego Conti, por su parte, expresó su preocupación por la posible «eliminación de una institución» histórica y el riesgo de que las decisiones sean tomadas por el gobierno de turno.
El presidente de la bancada Más para Entre Ríos, Martín Oliva (Uruguay) sostuvo que la ley «llegó con limitaciones, con dos integrantes del Poder Ejecutivo con doble voto y un síndico propio. Eso es control absoluto. La ley no habla de sindicatos, habla de agrupaciones. Y nosotros instituimos y velamos por derechos de los trabajadores”. Acotó a continuación: “Con el máximo respeto que me merece el gobernador, dijo que la salud no puede ‘estar en mano de los sindicatos’. ¿Saben en manos de quiénes está la salud? De los médicos, de los trabajadores de salud, en los distintos subsistemas. No es mala palabra para mí ‘sindicato’, la voy a reivindicar. Si tiene que venir alguien del Ejecutivo, no hay drama, pero con los trabajadores. No está en discusión cambiar la ley, mucho menos cambiar su nombre y su identidad”.
Fuente: Página Política