
Cuando Rogelio Frigerio estaba por despegar rumbo a Alemania, la Cámara de Diputados se aprestaba a sesionar en una jornada en la que se desconocía si se lograba el quórum, lo que finalmente se consiguió. Los diputados del Gobernador, a excepción de Nancy Ballejos, prestaron sus votos para que esto suceda. Quien lo subrayó fue la excéntrica diputada de La Libertad Avanza, Lilia Lemoine, en su cuenta de X y en un video con celular en la que escrachó a la periodista libertaria Marcela Pagano, en el marco de la interna en su espacio.
La sesión tenía en agenda el tratamiento de partidas presupuestarias vinculadas al funcionamiento del Hospital Garrahan y la financiación de las universidades nacionales. Temas sensibles paraa decidir de qué lado estar.
Antes, la reunión de ministros de Economía con el secretario de Hacienda de la Nación, Carlos Guberman, no había sido buena. Las provincias reclamaron la coparticipación del impuesto a los combustibles y los remanentes de los ATN, pero Nación sólo ofreció cubrir una parte de las asignaciones específicas del impuesto a los combustibles, lo que significa unos 300 millones para las provincias. Un monto marginal.
La respuesta a ese cónclave, que dejó enojados a los mandatarios, fue la presentación de proyectos en ese sentido con las firmas de los presidentes de bloque en el Senado de Unión por la Patria, la Unión Cívica Radical, el PRO y otros espacios provinciales. Allí estampó su rúbrica Alfredo De Angeli.
Quienes lo frecuentan a Frigerio aseguran que no está sobre la voluntad de los legisladores, excepto en algo puntual por un llamado de Casa Rosada. El octubre del año pasado, cuando el gobierno nacional se propuso vetar la reforma previsional, los legisladores de Juntos por el Cambio Frigerio también jugaron de la misma manera: Nancy Ballejos acompañó al oficialismo sobre la hora y Francisco Morchio se ausentó. Una semana antes, cuando debió tratarse el veto al financiamiento educativo, Ballejos empujó el mandato de Mauricio Macri de apoyar el veto y Morchio lo hizo por la negativa.
A menos de un año de aquellos episodios, en la administración de Frigerio entienden que el Congreso dejó de ser un ámbito de negociaciones. Gobernadores pueden dar fe de haber acompañado el plano legislativo y no llevarse nada de una reunión con un ministro. Desde esa perspectiva es que el proceso electoral que viene tiene como objetivo construir la gobernabilidad desde mayorías sólidas.
El jefe del Estado entrerriano se muestra como el más dialoguista de los gobernadores con el Presidente. Un hombre muy cercano lo puso en los siguientes términos ante la consulta de Página Política: “Rogelio está entre los dialoguistas, a diferencia de otros que ya se pintaron la cara para ir a la guerra”. A renglón seguido, le dio un contexto: “Sucede que es de los pocos con posibilidades de llegar a un acuerdo electoral”.
Mientras tanto, Frigerio se mueve en torno a lo que puede llegar a recibir. La semana pasada se conoció una autorización del Banco Central para que la provincia pueda colocar deuda por 120 mil millones de pesos. Por estos días, esperan un envío de fondos de la Anses para paliar el déficit de la Caja de Jubilaciones.
Fuente: Página Política