
Los errores en el pedido de extradición terminan ayudando al ex senador Edgador Kueider y a su secretaria, Iara Guinsel Costa. Así lo consigna este domingo el matutino Página 12 que puso al entrerriano en tapa bajo el título “A pedir de Kueider”.
La nota de Raúl Kollmann señala que por otro lado, la Justicia paraguaya lo favoreció al no investigar su celular para rastrear, por caso, el origen de los 200 mil dólares que le secuestraron cuando intentaba ingresar al vecino país.
“El pedido de extradición de Edgardo Kueider es un papelón. Parece hecho a propósito para que lo rechacemos y no vaya a Argentina”, registró el matutino en entrevista con un jurista paraguayo que dio cuenta del rechazo al pedido de extradición planteado por la jueza Sandra Arroyo Salgado y la cancillería argentina. El argumento es que está mal formulado.
El fiscal paraguayo dictaminó que el texto sólo plantea la calificación -enriquecimiento ilícito, lavado de dinero- pero no enumera los hechos de la imputación a Kueider, entre los cuales obviamente el punto clave es que apareció en la frontera con 200.000 dólares en efectivo que no figuran en sus declaraciones de bienes, que cobró coimas en una empresa de seguridad y que tiene departamentos de lujo en Paraná, que tampoco están declarados.
Por lo tanto, el pedido de extradición se devolvió a la Justicia argentina, vía Cancillería, y deberá ser corregido. Mientras tanto, la coartada de Kueider y su pareja, Iara Guinsel Costa, evidencia una especie de colección de muñecas rusas: sociedades truchas creadas por otras sociedades truchas y así sucesivamente. Todo hace pensar que el dinero ingresado a Paraguay fue producto de un ilícito “pero nosotros no tenemos elementos para probarlo”, señala el fiscal guaraní. La sospecha es que el oficialismo libertario le compró su voto en la Ley Bases, por lo que está más que conforme con que se quede en Asunción, calladito.
Extradición mal formulada
El jurista paraguayo confirmó que el pedido de extradición llegó a Asunción, está en manos del juez de garantía, pero fue rechazado por la fiscalía por “no reunir los requisitos establecidos internacionalmente”. Por lo tanto, está en proceso de devolución a la justicia argentina a través de los canales diplomáticos. La cuestión demorará indefectiblemente la posibilidad de que Paraguay envíe a Kueider a la Argentina.
De volver a la Argentina el ex senador debería cambiar su estancia en el edificio Tierra Alta del Maestro, en Asunción, por un pabellón masculino en el penal de Ezeiza y un pabellón femenino para Guinsel Costa.
Las objeciones del fiscal al pedido enviado por Arroyo Salgado y la Cancillería son varios:
* No se relatan los hechos por los cuales se requiere a Kueider. Sólo hay una enumeración de calificaciones de los delitos.
* Se pide la extradición de Kueider para tomarle declaración indagatoria. Los paraguayos dicen que no es motivo de extradición. Incluso una indagatoria se podría tomar en Paraguay, con la asistencia de un magistrado guaraní.
* Se señala a Kueider como un prófugo, pero el entrerriano no lo es. Se sabe dónde está, no está en paradero desconocido como para que Interpol lo busque en el mundo.
De todas maneras hay que tomar las cosas con pinzas porque hasta ahora la justicia paraguaya benefició a Kueider: lo más evidente es que ni siquiera secuestró los celulares de la pareja, una evidencia elemental para probar delitos. Además, de inmediato le otorgó la prisión domiciliaria, medida que incluso se concretó antes de que pagaran la fianza.
La fiscalía paraguaya tiene hasta el 5 de abril para reunir las pruebas y formular la acusación. En ese momento, el abogado de Kueider y Guinsel Costa, Ricardo Preda, responderá a los cargos y el juez tendrá la última palabra y decidirá si el expediente va a juicio oral. El delito es contrabando de divisas (lo sorprendieron ingresando los 211.000 dólares), que tiene una baja pena en expectativa: unos tres años, en suspenso.
Fuente: Página Política