Si no se suspenden las PASO, a mitad de mayo se definirá el escenario electoral cuando se cumpla el plazo para la inscripción de alianzas. Ese día, el 15 de mayo, se sabrá si en Entre Ríos el gobernador Rogelio Frigerio marcha a las elecciones de medio término en alianza con el partido de Javier Milei.

Una pieza clave para ese entendimiento es la UCR, en tanto constituye el principal partido de Juntos por Entre Ríos, el frente con el que Frigerio llegó al poder en 2023. Los radicales tienen un par de estaciones previas determinantes: en abril deberán renovar su conducción partidaria y, a más tardar a principios de mayo, el congreso provincial de la UCR se deberá reunir para resolver la política de alianzas del partido.

Al interior del radicalismo conviven líneas diametralmente enfrentadas en este punto. Y nadie puede saber hoy cómo terminarán dándose las relaciones de fuerza dentro del máximo órgano partidario, que se compone de congresales de toda la provincia. Esos congresales se renovarán en la interna partidaria de abril.

En los primeros 10 días de febrero se sabrá si se suspenden o no las PASO y, en consecuencia, si los radicales tendrán o no más tiempo para fijar posición sobre la decisión más importante del año electoral, que determinará si el escenario electoral en la provincia es de tercios, como en 2023, o se polariza. La posibilidad de que un escenario de tercios permita un triunfo del peronismo (que en 2023 perdió la gobernación por sólo dos puntos) sigue siendo la razón electoral más contundente para una alianza Frigerio-Milei.

“Todavía estamos dentro de un proceso con mucha incertidumbre”, se excusa el presidente del Comité Provincial, Fuad Sosa, cuando Página Política le pregunta qué debería hacer la UCR de Entre Ríos ante la posibilidad de que el gobernador Rogelio Frigerio impulse  un acuerdo electoral con La Liberta Avanza.

El presidente del principal partido de Juntos por Entre Ríos, afirmó que “ampliar las alianzas siempre ha sido un norte. Pero hay que verlo en qué marco y cómo, si es en base a un proyecto o por una mera cuestión electoral”.

 

-Más allá de los pasos formales que debe superar la UCR, la pregunta es por tu posición personal frente a una alianza con LLA.

-Creo que hay que discutir y ver en qué condiciones. En esto de mantener y ampliar Juntos por Entre Ríos está la posibilidad de un acuerdo con la LLA. Esto es política y hay que ver si nos conviene a los radicales. Hoy por hoy, no tenemos una conversación seria. Si lo miro por los procedimientos metodológicos o por el perfil ideológico, si LLA está en el norte, yo estoy en el sur. Pero esto es política y si hay una necesidad y además un programa o proyecto de transformación que nos sirva a los entrerrianos y a los argentinos, yo me sumo.

 

-¿Creés que el congreso radical de Entre Ríos podría aprobar una alianza con Milei?

-Hay muchos sectores. En el último congreso escuché expresiones varias y unos cuantos me llamaron la atención, algunos motorizados por Azcué (intendente de Concordia) dijo que estaban de acuerdo y que no veían motivos para no ir a una alianza. También hay otros que terminantemente se oponen a mezclarnos ideológicamente con LLA. Pero en esto hay que ver cómo nos posicionamos en Entre Ríos, tenemos que seguir sosteniendo el gobierno, que es nuestro gobierno.

En ese marco hay que evaluar si la suma es solo electoral, por un proyecto cierto de crecimiento para Entre Ríos. No es sumarnos por sumarnos. Amontonarnos no nos sirve, ya nos pasó con Macri, cuando quedamos mirando la fiambrera. En cambio acá somos parte de este gobierno, nos sumamos con la Vicegobernadora (Alicia Aluani) y tenemos diputados y senadores para una alianza en serio.

 

-¿El radicalismo puede ir en contra de lo que decida Frigerio en materia de alianzas?

-Por supuesto, depende de lo que pretenda Frigerio. No nos hemos sentado a discutir. Si pensamos distinto ¿por qué no? No vamos a discutir por los medios, primero vamos a charlar con los amigos que integramos la alianza.

 

-¿Tenés algún candidato para la conducción de la UCR?

-Todavía no. No hemos hablado, pero tengo que cumplir con los plazos legales de convocar 60 días antes (a las elecciones partidarias) para que nadie se sorprenda y nadie quede afuera.

Fuente: Página Política