¿Asoma una interna en el gobierno? No aún, pero diferencias en un tema sensible empiezan a ponerse de relieve en el ámbito de lo público.
Un sector del Poder Ejecutivo estudia la posibilidad de reducir a siete, hoy en nueve, el número de miembros del Superior Tribunal de Justicia (STJ). Esa idea cuenta con el visto bueno de algunos integrantes del alto cuerpo.
Sin embargo, en el Ministerio de Gobierno, a cargo de Rosario Romero, le bajaron las expectativas a esa iniciativa. El secretario de la provincia Justicia Pablo Biaggini, que depende de esa cartera, respondió ante la consulta: “En materia de la estructura estamos analizando una reforma de la ley orgánica del Poder Judicial, pero no desde el punto de vista de la organización política. No creemos que siete o nueve miembros sea el debate sustancial”. Y agregó: “Creo que lo que tenemos que tratar es que la ley orgánica refleje la estructura real del Poder Judicial de modo que eso le permita mejorar su funcionamiento en términos de eficiencia y eficacia”.
La posibilidad de reducir el número de vocales que un sector del Ejecutivo tiene en el tintero surgió luego de que se conociera que Leonor Pañeda inició sus trámites jubilatorios y que Bernardo Salduna en un futuro no muy lejano seguiría esos pasos. En el programa Cinco Esquinas que se emite por FM Costa Paraná se lo consultó al funcionario acerca de qué sucederá entonces si no está en carpeta un proyecto de achicar el alto cuerpo ante la salida de la vocal. La respuesta fue: “Estamos ante una vacante próxima, pero que no ha acontecido. Creo que no hay que adelantar los tiempos. El Gobernador seguramente podrá tener alguna idea de algún profesional reconocido para ocupar el lugar. Honestamente no se encuentra hoy como tema de conversación o análisis. Seguramente cuando la vacante ocurra se merituará”.
Entre los elementos que aparecen para achicar el alto cuerpo están las creaciones de las cámaras contensioso administrativo y de casación que absorbieron buena parte de los casos que tenían como destino el STJ. En lo político, evitaría a Gustavo Bordet someterse a una negociación de un tema que no está en sus prioridades. El mandatario no suele estar atento a los acontecimientos que suceden en los tribunales. La única designación que le tocó cubrir con la salida de Carlos Chiara Díaz la hizo en el marco de una mesa en la que se sentó Cambiemos. Guste o no fue novedoso si se lo compara con las últimas experiencias. El Gobernador no tiene un operador judicial como Sergio Urribarri tuvo a Julio Rodríguez Signes o Jorge Busti a su ex socio y actual vocal Omar Carubia. Podría ser una deficiencia.
La única funcionaria con llegada al Poder Judicial, porque es un ámbito en el que se ha desempeñado y aportado desde la Legislatura y la Convención Constituyente de 2008, es Romero, quien no estaría participando del abordaje de la iniciativa que sugiere reducir el STJ.
