Quince días después del acuerdo que, en el orden provincial, evitó la interna radical para la renovación de autoridades partidarias, el concejal y presidente saliente del Comité Concordia de la UCR, Esteban Benítez, dio los motivos por los que no aceptó integrar el Comité Provincial.

Benítez fue uno de los referentes que sostuvieron la postulación a presidente de la UCR provincial del diputado Jorge Lacoste. En ese carácter fue orador en el único acto que tuvo el proceso interno, en la sede central de la UCR, el pasado 8 de septiembre (fotografía).

En la lista que Lacoste puso sobre la mesa para la negociación y que estaba dispuesto a presentar si había internas, Benítez ocupaba la vicepresidencia segunda.

Sin embargo, su nombre no apareció en la lista de consenso para el Comité Provincial.

El sábado pasado, el sector de Lacoste y Sergio Varisco se reunió en Concordia para dar su apoyo al exdiputado Marcelo López para presidir la departamental que deja Benítez, que también integra la lista de López como congresal.

Ahora, en un extenso comunicado, Benítez afirma que hace dos semanas se autoexcluyó de la lista de consenso para el comité provincial que presidirá el intendente de Villa Elisa, Leandro Arribalzaga por “diferencias insalvables con muchos dirigentes y el direccionamiento, que pienso, debe darse al partido”.

Cargos

“No veo un radicalismo que se pare a defender sus banderas históricas frente a la sociedad. Algunos le echan la culpa a nuestros socios electorales (PRO) pero no veo eso, más bien es una carencia propia, es decir no puede existir una falta total de posicionamiento político”, reprocha.

“Solo veo una lucha de cargos que simplemente envilece nuestro rol. No puede empequeñecerse la discusión con nuestros socios electorales, a solo un pedido de participación en los cargos del gobierno”, cuestionó.

Al dar los argumentos por los que decidió no ser parte del Comité Provincial, Benítez da a entender que la próxima conducción no será capaz de dirigir un partido “que discuta políticas de gobierno, que aporte, desde la inagotable formación histórica, cual es, en cada medida oficial, el mejor rumbo”. Un partido que “se pare como opositor al gobierno provincial, sin miedo a la represalia nacional, enfrentando el contubernio, no por ser oposición por la oposición misma posicionándose en la discusión de los temas fundamentales y ayudando, si es necesario, al Gobernador en los que compartimos las mismas ideas”.

“Veo una lucha despiadada por cargos partidarios y poca discusión política acerca de proyectos. Personalmente he sido pasible de denuncias públicas, de lo más arteras, primero me trataron deudor serial, para desprestigiarme éticamente cuando nunca tuve deuda partidaria y el Tribunal de Ética, de nuestro partido, lo ratificó claramente. Ahora más recientemente se me denunció que manejaba dinero de Cresto, para la interna partidaria, nada más irracional y falaz. Yo puedo decir, que me he mantenido siempre fiel a mi rol opositor en Concordia y me he destacado por enfrentar muchas de las políticas de Cresto”, reprocha el concejal.

“En estos momentos, mi partido popular se prepara para entrar nuevamente a un proceso electoral. Necesita poner en la mesa sus proyectos y no sólo la discusión estéril de los nombres. Muchos ciudadanos, reconocen a figuras que han logrado popularidad pero no conocen lo que piensan sobre las cosas fundamentales. Es necesario darle contenido a la política en medio de tanta farandulización y tanta mediocridad”, plantea.