El Superior Tribunal de Justicia (STJ), con una conformación especial por excusaciones obvias a causa del largo proceso, convalidó lo resuelto por el Jurado de Enjuiciamiento cuando destituyó a la procuradora adjunta Cecilia Goyeneche.
La nueva conformación se integró con los vocales Miguel Giorgio, Leonardo Portela, Jorge Pirovani, Germán Carlomagno y Susana Medina; y los jueces Gervasio Labriola, Paola Firpo, Walter Carballo y Alejandro Grippo.
Según supo Página Política, la votación logró una mayoría y a última hora de este jueves se confirmó que habían rechazado la impugnación por inconstitucionalidad.
De esta forma, a Goyeneche solo le quedaría presentar un recurso de queja ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Esto debilita las posibilidades de encontrar buenas noticias en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En CABA probablemente tenga más suerte en el dispositivo comunicacional en el que trabajó el reconocido publicista Carlos Fara, como reveló oportunamente este medio.
En la Corte Suprema queda por resolver la acción de amparo que presentó Goyeneche donde atacó el corrimiento del Ministerio Público Fiscal como la parte acusadora en el proceso. En su lugar estuvo un abogado ad-hoc, Gastón Justet. Esa determinación obedeció a que el Jurado de Enjuiciamiento consideró que en el proceso contra la procuradora adjunta no podía ejercer como acusador su jefe inmediato, Jorge Amilcar Luciano García; ni un subordinado.
Cuando esta cuestión se judicializó y debió resolverse en esta jurisdicción, el juez Guillermo Federik sostuvo en su fallo que el procurador también había sido denunciado por los abogados Rubén Pagliotto y Guillermo Mulet en la misma presentación que cuestionaba la actuación de Goyeneche. Pero además señaló que, “frente a una situación excepcional”, el Jurado de Enjuiciamiento tomó la decisión de apartar al Ministerio Público Fiscal “haciendo uso de esas facultades propias discrecionales, en un marco de una clara situación excepcionalmente grave, y en una muestra de transparencia y objetividad”.
Sobre la posibilidad de que sea cualquier fiscal el que debía juzgar, Federik acudió a las manifestaciones públicas de los fiscales en apoyo a su jefa, lo que fulminó cualquier posibilidad de que se garantizara la idoneidad. “Estas conductas por ser públicas, notorias y de acceso absolutamente irrestricto y de constante bombardeo en los medios televisivos cada vez que se hablaba de algún tema de corrupción, revelan que existía un fundado temor de falta de objetividad de los integrantes del Ministerio Público Fiscal para asumir la acusación ante el jury, en función de las propias manifestaciones y declaraciones públicas de sus integrantes”, escribió Federik en su fallo.
El asesoramiento mediático, evidentemente, no fue el correcto. Muchas veces verse en televisión trae costos.
Goyeneche tiene una sentencia firme, lo que implica que ya no percibirá su salario y deberá dejar de ir a los tribunales.
Fuente: Página Política
