La conducción partidaria propuso compartir con las listas los gastos de la elección interna convocada para el 10 de agosto, a fin de seleccionar los candidatos de la UCR a senadores y diputados nacionales para las elecciones de octubre.
Según narraron desde la lista Militancia Activa, que reúne a la dirigencia más crítica al gobernador Rogelio Frigerio y que se opone a cualquier alianza con La Libertad Avanza, el Comité ofreció costear un tercio del gasto de impresión de las boletas y que las dos listas anotadas aporten los dos tercios restantes.
Los opositores -que llevan como candidatos a Rubén Pagliotto para Diputados y María Elena Herzovich para el Senado- rechazaron esa idea, bajo el argumento de que el partido debe garantizar la democracia interna, dado que ese fue el espíritu de la reforma a la carta orgánica en la que se adoptó el sistema de boleta única de papel que se viene usando para la renovación de autoridades partidarias.
El 10 de agosto será la primera vez que se usará para la selección de candidatos. Esa fue la manera en la que el partido suplió la ausencia de las PASO. Los candidatos para las elecciones de octubre seguirán surgiendo de una elección, pero con un padrón mucho más chico que el de las primarias, limitado sólo a los afiliados a la UCR.
Eso baja enormemente los costos en relación a lo que se estimaba, por ejemplo, para la interna abierta del PJ, con un millón de potenciales votantes. Se hablaba allí de 350 millones de pesos con la intervención del Correo Argentino, pero la cifra descendía a 20 millones sin el Correo.
Con 75 mil afiliados, que tras las depuraciones de la Secretaría Electoral se redujeron a unos 53 mil, el costo de la interna radical es considerablemente menor. En particular si se toma en cuenta el histórico porcentaje de participación, que nunca ha superado las 20 mil personas.
En teoría, el partido debería imprimir 53 mil boletas únicas, pero en los hechos con la mitad alcanzaría. La última interna, de abril de 2023, que despertó especial interés porque enfrentaba a los radicales frigeristas con los no frigeristas y que resultó muy competitiva, no alcanzó los 15 mil votantes.
La lista que encabezó Fuad Sosa (donde milita la dirigencia que apoya a Frigerio) fue votada por 7.504 afiliados en toda la provincia (51,45%). La lista que encabezó Darío Schneider (impulsada por el sector que propone a Pedro Galimberti para la gobernación) recibió el apoyo de 6.977 afiliados entrerrianos (47.83%).
Aportes
El rechazo a la propuesta del Comité fue acompañado por un reclamo para que se exija el aporte partidario a los funcionarios, que abundan en la lista oficialista o más cercana a Frigerio, encabezada por Atilio Benedetti para el Senado y Darío Schneider para Diputados y que se anotó con el nombre Corriente para construir.
Según fuentes del Comité que encabezó Sosa hasta el mes de mayo, la UCR dispone de recursos para afrontar una elección, provenientes de los aportes partidarios que crecieron exponencialmente con la integración de dirigentes radicales al gobierno provincial desde diciembre de 2023. La gestión de Sosa , justamente, puso el acento en este tema, al punto de motivar peleas y hasta deserciones del partido.
Aseguran que dejaron el partido con millonarios plazos fijos que sobrarían para financiar una elección como la del 10 de agosto.
La posición oficial
Consultado por Página Política, el secretario del Comité Provincial, Marcelo Monfort, informó que con el propósito de reducir costos se acordó, entre los distintos grupos que participan de la elección, imprimir sólo 30 mil boletas.
El costo de esa impresión aún no se tiene porque están esperando la respuesta a un pedido de presupuesto. De eso dependerá si mantienen la propuesta de compartir los gastos con las dos listas.
Monfort aseguró, además, que todos los funcionarios que integran listas de precandidatos a diputados y senadores nacionales han presentado su libre deuda por los aportes al partido. Las dudas estaban planteadas en que, según afirman desde la oposición interna, algunos de los candidatos vendrían efectuando un aporte menor al exigido en la carta orgánica, del 10% de su sueldo.
Fuente: Página Política
