
¿Se puede debatir con el gobierno nacional? No hay ni habrá posibilidades. Javier Milei ha dado un paso más. Incorporó a su menú la convocatoria a odiar. Llamó a hacerlo con los periodistas. Antes lo hizo con los gobernadores, cuando se propuso “fundir a las provincias”. Es uno de los pocos objetivos que viene cumpliendo el Presidente con el apoyo de su ministro preferido, Luis “Toto” Caputo, ex compañero de gabinete de Rogelio Frigerio.
La reunión de gobernadores en el Centro de Convenciones (CPC) de Paraná generó expectativa por la presencia de Axel Kicillof. Incluso en Casa Gris se respiraba esa sensación ante su llegada. Le daba fuerza a una liga de gobernadores que viene, a través de diferentes dispositivos regionales, reclamando de buenas maneras, buenos modales y las vías institucionales, lo que entienden que le corresponde. Sucede que la vida pública parece haber cambiado, como el paradigma económico comercial que impera en el mundo y el propio Kicillof narró ante el auditorio: Estados Unidos, padre del libre comercio de post guerra acaba de aplicar una política arancelaria inédita para todo el globo.
Los mandatarios convocando a construir un país “más federal, productivo y del trabajo” no solo no despiertan entusiasmo en sus círculos rojos, sino tampoco afuera. En el cónclave no hubo críticas directas al gobierno nacional. Las referencias, en rigor los cuestionamientos, se expresaron entre líneas, de manera casi encriptada. Aquí la crónica:
Kicillof, del que se esperaba que dispare la bala de plata, comenzó diciendo que se había “comprometido a no polemizar tanto”. La idea, en definitiva, fue tenerlo para que la foto cobre valor ante la Casa Rosada. Se entiende, algunos de los mandatarios, entre ellos Frigerio, esperan ansiosos firmar un acuerdo electoral con La Libertad Avanza para octubre.
Esa idea, también esgrimida en el CPC, de atreverse a pensar en una política de mediano y largo plazo entre todas las fuerzas, parece atascarse por el cronograma electoral. Posiblemente la ausencia de Jorge Macri haya sido por la cercanía con las elecciones del 18 de mayo en su comarca.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires fue convertido, por unas horas, en un moderado más. De todos los que subieron al estrado es el que menos tiene para perder. Fue, en todo este tiempo, el que menos fondos recibió según los informes oficiales. Sin embargo, su distrito, es el que más inmigrantes desocupados recibe del interior, un proceso que se acrecentó notablemente en los ‘90 y que debería incorporarse en la discusión sobre el federalismo.
El encuentro de este martes fue una puesta en escena interesante. Antes que se dé comienzo a la lista de oradores se proyectó un video de un minuto que recorrió los potenciales de las provincias que dieron el presente. El cierre también estuvo en plataforma audiovisual. Otro video de un minuto mostró lo mismo, pero sobre Entre Ríos.
La idea: hacer política, sin confrontaciones, en imágenes y en 60 segundos.
Fuente: Página Política