El acto debió ser institucional. Pero no lo fue. Hubo discurso proselitista y arenga peronista. La convocatoria había sido para entregarle a Jorge Busti honoríficamente los atributos de mando al cumplirse 30 años de haber llegado a la Gobernación de Entre Ríos. Además de conmemorar el primer triunfo justicialista luego de la dictadura.
La jornada fue en el Salón Blanco y el anfitrión, obviamente, fue Gustavo Bordet.
Pasadas las cuestiones protocolares, Busti les habló a los peronistas. Comparó el 6 de septiembre de 1.987 con el momento actual. Dijo que como aquel entonces “el peronismo también estaba muy mal, no tenía conducción nacional y había muchas contradicciones tras la derrota estrepitosa con un hombre como Raúl Alfonsín, con gran carisma, más culto que el Presidente actual. Pero la militancia se juntó y creo que es lo que falta ahora: dejar de verse tanto el ombligo el dirigente justicialista”, lanzó. A renglón seguido destacó que en Entre Ríos participaron 10 listas y “todos sabemos que tenemos que fortalecer el federalismo y al gobernador para que no se pierdan 3.600 millones para la provincia de Entre Ríos”, dijo, en referencia al planteo que hizo María Eugenia Vidal por el conocido fondo del conurbano.
Bordet también les había hablado a los peronistas. Los instó a trabajar para las elecciones de octubre para recuperar el gobierno nacional y “continuar” en la provincia.
La vieja guardia
El paisaje fue una foto cabal de la vieja guardia bustista en todos sus aspectos. Estuvieron Martín Fabre, Oscar Balla, Alicia Haidar, Santiago Gaitán, Rubén “Pelito” Sarmiento, Oscar Horacio Mori, Héctor Alanis, José Carlos Halle, Diego Valiero, José Eduardo Lauritto, José Cáceres, Francisco Taibi, Adrián Stur, Julio Federik y Marcelo Casaretto, quien horas antes le hizo su propio homenaje en Facebook. Se sabe que muchos de ellos fueron funcionarios de peso de Busti y ocupan un lugar en la gestión de Bordet.
También la escudería judicial dio el presente con Susana Medina de Rizzo, Emilio Castrillón, Omar Carubia y Germán Carlomagno. Todos vocales del Superior Tribunal de Justicia (STJ) que alcanzaron sus vocalías por designación de Busti.
La periodista Sonia Fernández llegó como invitada, se encargaron de aclarar a Página Política. Blas García, ex titular del Iafas, llegó con su cámara. Fue, en los últimos años ya con Busti fuera del poder, el fotógrafo de las actividades del Frente Entrerriano Federal (FEF). Su hijo Gonzalo, ex secretario de Juventud y con función en la administración actual. El infaltable Osvaldo Segovia, vocero en los actos del ex gobernador, se paseó por el salón.
Mercedes Basso, ex secretaria del Senado y hasta hace poco colaboradora del ex ministro de Salud, Ariel de la Rosa, dio el presente. Antonio Alizegui, sindicalista y ex diputado nacional, se ubicó en la segunda fila, al lado de Castrillón y detrás de Hugo Ballay, Carlos Schepens y Laura Stratta. Al lado se sentó el primer candidato oficialista, Juan José Bahillo. Mayda Cresto y Gustavo Zavallo estaban un poco más atrás. Del campamento de Sergio Urribarri no hubo nadie. Sergio Granetto, titular de la ATER, fue secretario de Gobierno de Blanca Osuna y su lugar en lel organismo recaudador fue, en parte, por impulso de Mauro Urribarri.
Al cierre del homenaje, Mariel Ávila agasajó a Cristina Cremer con la entrega de un ramo de flores. Elvio Bordet, padre del mandatario, fue también homenajeado por el propio Busti cuando recordó que le entregó los atributos en la Intendencia de Concordia.
La sorpresa, quizás, la dio Adán Bahl. El vicegobernador llegó sobre la hora, pero decidió quedarse entre la gente, parado, y atrás. Desde ya que estaba Víctor Prigioni, pero esta vez como invitado. Por eso no mandó gacetilla.
