
Ante la falta de acuerdos con los gremios docentes, el Gobierno anunció este martes el pago por decreto del aumento que ya percibieron los estatales.
Cuando faltaban unas horas para que se efectivice el nuevo paro de dos días convocado por el gremio mayoritario, Agmer, desde la Casa Gris se intentó esta jugada en pos de arribar a un acuerdo con cada uno de los docentes, cada uno y sus bolsillos.
La decisión deja afuera a los sindicatos, aunque en materia de salarios docentes y negociación salarial vale decir que lo que manda es la palabra de las asambleas de los trabajadores de la educación en cada escuela de la provincia.
No hay otra base para las resoluciones del congreso provincial de Agmer que viene diciendo “huelga” y sosteniendo altos niveles de acatamiento. Así ha sido, no tanto por la voluntad de la dirigencia sindical y los miembros paritarios como por malestar y mandato de maestras y maestros, profesoras y profesores de Federal, Nogoyá, San Salvador, Gualeguaychú, y así, en todos los departamentos que suman sus voces para resoluciones unánimes.
Rota la instancia paritaria, el Gobierno anuncia el pago del aumento por decreto. También reitera que se sigue con la política de descontar el día de huelga (que para un docente de primaria, en promedio, supone entre 15 y 20 mil pesos).
Pero no paga cualquier aumento. Paga el primero que ofreció a los docentes, con las mismas características que el que ya pagó a los trabajadores estatales, representados en la mesa de negociación salarial por ATE y UPCN.
De esa manera, mete un puñal fuerte en la negociación. Deja afuera a los jubilados porque el monto de 120 mil pesos (de la primera oferta), pagadero en cuotas, no impacta en el haber de los pasivos.
Fue esta condición una de las razones más fuertes por las que se rechazó este primer esquema de aumentos planteado por el Ejecutivo. Y fue por eso que el segundo ofrecimiento (que ahora ha quedado en la nada) sí contemplaba a los jubilados. El monto fijo se elevaba a 200 mil pesos, también en cuotas, con impacto en el haber de los pasivos.
Más allá de los recursos que supone el pago del aumento, el Gobierno mete una cuña en la negociación. Deja afuera a los jubilados y paga menos que lo que oportunamente se puso como zanahoria en la mesa paritaria.
Se verán los resultados en la dinámica que este miércoles y jueves adquiera la protesta docente, expresada en las aulas vacías.
Fuente: Página Política