La idea se viene barajando como posibilidad desde el año pasado, pero se reavivó la semana anterior, tras la visita a Paraná que realizó el ministro del Interior, Rogelio Frigerio.

El máximo referente de Cambiemos de Entre Ríos mantuvo numerosas reuniones por separado con referentes de Cambiemos de distintos partidos y con radicales de distintas pertenencias internas. Es en la UCR donde se disputa la candidatura a gobernador, con tres postulantes: Atilio Benedetti, Jorge Lacoste y Pedro Galimberti.

En la medición de imagen, la ventaja la tiene Benedetti. Eso es aceptado por todos. En la corriente Illia ya hace tiempo que están convencidos que terminará siendo el candidato. Y tras la visita de Frigerio refuerzan esa percepción.

Es que el jefe político de Cambiemos no dio ninguna señal en contrario. Creen que, aunque no le guste mucho, Frigerio deberá aceptar que no tiene otro candidato mejor para Entre Ríos.

Pero el ministro político de Macri no cerró ninguna posibilidad. No pidió lista de consenso, aunque en sus charlas con referentes de Cambiemos apuntó siempre a poner racionalidad y límites a una eventual pelea interna.

¿Acuerdo?

Como están hoy las cosas, la propuesta provincial de Cambiemos para las elecciones de junio tiene dos posibles soluciones: 1) Lista única con Benedetti acompañado en la fórmula por un candidato o candidata propuesta por PRO y 2) elecciones internas.

Para el segundo caso, dirigentes radicales y macristas vienen evaluando la conveniencia de limitar la competencia a la fórmula de gobernador y vice. Y que los dos o tres aspirantes a la gobernación lleven a las PASO la misma lista de candidatos a diputados provinciales.

Sería una forma de ordenar los departamentos, para limitar internas desgastantes que podrían hacer perder intendencias.

Pero, sobre todo, para lograr un armado para las elecciones de junio que exprese mejor a todos los sectores internos de Cambiemos y, en consecuencia, resulte más competitivo.

Es que si cada precandidato a gobernador lleva su lista de diputados a las PASO de abril, puede que luego, al darse representación a las minorías, la lista para junio quede desbalanceada.

Podría ocurrir, por caso, que el PRO termine teniendo más presencia en las listas que surjan de una interna, con la integración de mayorías y minorías, que las que tendría por peso propio en una mesa de negociación de dirigentes para el armado de una lista única. Es una posibilidad: los precandidatos a gobernador radicales se verían obligados a armar para las PASO con candidatos del PRO en lugares expectantes de la lista, a fin de captar al electorado no radical de Cambiemos.

Una lista de diputados consensuada sería –argumentan- el lugar de contención y confluencia no solo de las distintas expresiones de Cambiemos, sino de la propia interna radical.

Hay que recordar que la mayoría de los actuales diputados provinciales de la UCR están enrolados en la corriente Illia, que lidera Benedetti. Cuando asumieron en 2015, los diputados benedettistas eran seis sobre ocho radicales. Tras la separación de Alejandra Viola, son cinco sobre ocho.