Otra vez el foco está puesto en el peronismo “racional” o “dialoguista”. Ahora, porque corresponde que el Congreso de la Nación apruebe el Presupuesto que enviará Mauricio Macri, esquema de gastos e ingresos que lleva la marca ineludible del ajuste que llega de la mano del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Este domingo, La Nación da cuenta de las condiciones que pondrían el senador Miguel Angel Pichetto y compañía (hueste en la que se alistan los entrerrianos Pedro Guastavino y Sigrid Kunath) para avanzar con el aval en general al Presupuesto que enviará la Rosada. A las voluntades de Argentina Federal, nombre que lleva la identidad parlamentaria en ambas cámaras, se sumaría las que aporte el liderazgo de Sergio Massa.
El matutino porteño afirma que este espacio peronista “no K”, “no votará a libro cerrado: no aceptará que el mayor peso del ajuste del gasto público, una de las condicionalidades del acuerdo con el FMI, recaiga sobre las espaldas provinciales”.
En efecto, se recuerda que el acuerdo con el FMI supone el compromiso de Nación de recortar las transferencias “no automáticas” a las provincias en un 0,6% del PBI desde este año hasta 2020. Esto implica una reducción del 74% en términos reales de esta partida, que incluye gastos para educación, salud, asistencia social, vivienda, agua potable y transporte.
De qué se trata
“Las transferencias discrecionales a las provincias asociadas a gastos que han sido asignados como responsabilidad de cada provincia por la Constitución se irán reduciendo ya que las provincias tomarán estas responsabilidades”, reza el acuerdo con el FMI.
¿Cuáles son las transferencias no automáticas (o discrecionales) que la Nación gira a las provincias y de cuánto será el recorte previsto, según el acuerdo? Las transferencias no automáticas son aquellas partidas por fuera de la coparticipación que se giran a las provincias. Son de dos tipos, corrientes y de capital.
Dentro del primer rubro, están incluidos programas como el Fondo Nacional de Incentivo Docente y Compensaciones Salariales; las transferencias y contribuciones a la Seguridad Social (Cajas de Jubilación no transferidas) y la Asistencia Financiera a Provincias y Municipios.
Según un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), las trasferencias corrientes no automáticas registraron una participación en el PBI de 0,82% en 2017. En 2020 se pretende reducirla al 0,2% del PBI.
También hay un fuerte impacto al tocarse las transferencias no automáticas “de capital”. Son las que prevén la puesta en marcha de programas como los siguientes: “Acciones de Vivienda y Desarrollo Humano”; “Acciones del Programa Hábitat Nación”, “Recursos Hídricos” e “Infraestructura y Equipamiento” dentro del rubro educación, entre otros.
Según el informe de Iaraf, en el acuerdo con el FMI el Gobierno prevé que esta partida culmine con una participación equivalente al 0,03% del PBI, lo que implicaría una reducción equivalente al 95% con respecto a 2017.
