Gustavo Bordet anunció el viernes pasado que, en el marco de generar y sostener el empleo, hay que “aumentar los niveles de productividad”. Fue luego de un encuentro con sus pares de Santa Fe, Omar Perotti, y el de La Pampa, Sergio Ziliott y en el contexto en que se debate el cepo a las exportaciones. “Estamos pidiendo que se resuelve el tema de las exportaciones de carne en la República Argentina porque impacta en nuestras provincias”, sostuvo el entrerriano.
Bordet detalló que en Entre Ríos hay frigoríficos exportadores y “preocupa la mano de obra que allí trabajan. En esa preocupación estamos pidiendo al ministro Julián Domínguez que -sabemos que comparte esta preocupación- podamos resolver este conflicto para defender la fuente de empleo de los obreros de los frigoríficos como es el caso de Alberdi en Oro Verde y el San José de San José”, aseguró.
Y agregó: “Estamos pidiendo que estas medidas de cierre de exportaciones puedan reverse para avanzar hacia un sistema productivo integral que garantice que haya empleo sostenible y para que las cadenas de valor como la industria y el sector cárnico tenga la rentabilidad necesarias”.
Por su parte el ministro de Producción, Juan José Bahillo, reconoció “la situación difícil” y se mostró “preocupado por el alza de los precios de alimentos básicos, por eso es necesario encontrar puntos de encuentro para que el sector cárnico abastezca al mercado local con valores acordes al bolsillo de las familias”.
Contó que “la carne bovina entrerriana llegó en 2020 a 33 mercados externos y alcanzó los USD FOB 164.887.519,77 (el 11,57% de las exportaciones totales entrerrianas), o 43.049,98 toneladas. La tendencia en los últimos años ha sido de un crecimiento constante y esta medida ha generado riesgos en la estabilidad laboral de cientos de trabajadores”, explicó.
Propuesta
La Comisión Agraria del Partido del Trabajo y del Pueblo (PTP) emitió en las últimas horas una propuesta para bajar la carne en la mesa de los argentinos y aumentar el stock ganadero. Entre los firmantes está Pablo Benetti y Carlos Retamoza.
“Desde nuestro espacio creemos que para lograr bajar el precio de la carne en las carnicerías hay que implementar medidas que busquen aumentar la producción de carne y que, por ende, aumente la oferta de modo que cubra no solo el consumo interno sino también que permita exportar y generar divisas que sean volcadas en la misma producción ganadera, generando así un círculo virtuoso”, dice el texto. Enseguida puntearon una serie de acciones que ven pertinente para lo que se proponen:
1- Mejorar la eficiencia reproductiva, sanitaria, nutricional y la carga animal de los pequeños y medianos productores ganaderos, además de la falta de infraestructura adecuada para el manejo animal, que generan una menor eficiencia (relación ternero/vaca), siendo el estrato de 0 a 200 vacas donde destetan 42 terneros cada 100 vacas el que mayor potencial posee para mejorar. Podemos decir que el problema mayor se encuentra en la falta de ordenamiento del rodeo y los bajos recursos existentes para lograr una mayor eficiencia que involucra varios factores a mejorar. Aproximadamente 1,5 millón de terneros al año se pierden por falta de eficiencia en dicho estrato. Para esto hay que capacitar, brindar asistencia técnica y financiera al sector.
2- Subsidiar la cría con un pago por ternero destetado para los rodeos de menos de 200 vientres y 500 cabezas totales. Esto sería un incentivo para la inversión en infraestructura, manejo y sanidad y así poder mejorar el orden del rodeo.
3- Aumento del peso de faena de forma progresiva para que en un año esté por encima de los 400 kilogramos de peso mínimo. Esto permitiría volcar una media res más pesada al mercado y así, con la misma cantidad de animales faenados, se volcarían más kilos de carne en el mercado interno.
4- Permitir faena por debajo del peso mínimo sólo si el mercado se desabastece. Medida que se pueda tomar de forma transitoria, hasta lograr una cadena en la producción constante de animales que vayan a faena con más de 400 kilos vivos.
5- Financiar el aumento del peso de faena a los productores con garantía de los mismos animales retenidos. Esto le permitirá al productor aguantar la venta de sus terneros hasta llegar al kilaje de faena, priorizando a los pequeños y medianos productores ganaderos.
6- Intervenir en los frigoríficos exportadores para que vuelquen el tren delantero, que no va a exportación, a un precio diferenciado al mercado interno, garantizando estos cortes a precios populares.
7- Reapertura de la exportación de vacas viejas y toros de los pequeños productores a China. Esta medida es necesaria para reponer las vacas viejas por vaquillas, ayudando a mejorar los índices.
8- Para financiar lo antes propuesto se propone generar un Fondo Ganadero con lo recaudado de las mismas retenciones a la carne, generando un círculo virtuoso en la misma cadena productiva, diferenciando a los establecimientos dirigidos por mujeres y jóvenes quienes tendrán un trato especial a la hora de reasignar los recursos obtenidos por este Fondo Ganadero.
Fuente: Página Política
