La reforma política que impulsa Rogelio Frigerio logró este martes, a las 19.26, –al cabo de más de tres horas de debate– media sanción de la Cámara de Diputados. Pero no fue en los términos en los que el Gobernador lo había planteado desde el comienzo de este proceso.
Es que no fue posible alcanzar el consenso para un dictamen común, a pesar de que, según se encargaron de remarcar los diputados del peronismo, fueron muchas más las coincidencias que las diferencias.
Como ya lo venía haciendo en el debate en comisión, el principal bloque opositor se quejó del “apuro” del oficialismo para sacar la reforma política, que tiene como principal novedad la adopción de la boleta única de papel (BUP). Pero, con el explícito propósito de evitar que el oficialismo saque provecho político de esta disidencia, los diputados del peronismo se encargaron de remarcar, una y otra vez, que están a favor de la BUP.
La idea de que hubiera sido posible alcanzar un acuerdo para un dictamen común se afianzó cuando las diputadas Laura Stratta y Andrea Zoff detallaron cuáles eran las diferencias que tenía el dictamen de minoría.
Como jefa de bloque, Stratta resumió los reproches a sus pares del oficialismo por “cancelar el debate por una cuestión de tiempo”, en comparación con los procesos de reforma que se hicieron en Córdoba y Santa Fe. Pero remarcó que el justicialismo no está “en contra de los avances, sino que queremos debatir los cambios para implementarlos de la mejor manera. Queremos una ley que sea legitimada por el debate de ideas y por el aporte de todos”.
Remarcó que hay “muchos actores de la vida electoral que no fueron convocados para emitir opinión en los temas que le competen, como las Juntas Electorales Municipales y los Presidentes Municipales”. Resaltó que “los aportes que se adjuntaron al expediente en tratamiento por parte de agrupaciones políticas y especialistas, no se analizaron en comisión. Incluso, nunca se aclaró por que se tomaban determinados aportes y no otros”.
La presidenta del bloque opositor insistió en que “el cambio de un sistema electoral no constituye una cuestión menor que pueda compararse con el tratamiento de otras leyes, sino que se trata de un proceso político que requiere tanto de un debate público abierto, como de un cuidadoso proceso de construcción de consensos y de una evaluación integral de las opciones disponibles”.
Pero el discurso más claro del peronismo salió de boca del diputado Juan José Bahillo. “Nos hubiera gustado que el Gobernador nos recibiera para hablar de este tema” valoró, al mencionar que Stratta y el presidente del bloque se senadores, Martín Oliva le habían pedido una reunión. La intención era buscar el consenso “que veíamos que no se estaba logrando en comisión”. Bahillo aventuró: “quizá Frigerio hubiera entendido por qué queríamos tiempo”.
A favor
El dictamen del oficialismo fue acompañado en general por los diputados electos por La Libertad Avanza, que en la votación en particular se opusieron a la continuidad de las PASO y al financiamiento estatal de las campañas, en sintonía con la reforma impulsada por Javier Milei en el orden nacional. En la votación en general, el dictamen de mayoría recibió el apoyo de 22 legisladores, los 17 de Juntos por Entre Ríos a los que se sumaron los votos de Roque Fleitas y Débora Todoni (La Libertad Avanza), Carlos Damasco y Julia Calleros (Fe y Libertad) y Liliana Salinas (Partido Conservador Popular).
La diputada radical Gabriela Lena defendió el proyecto al comienzo de lo que calificó como una “histórica” sesión a la que se llegó después de “muchas reuniones y muchas discusiones”. Aunque lamentó que no se haya alcanzado un dictamen común, fue muy clara en los objetivos del oficialismo: “No vinimos a buscar una mayoría numérica. Vinimos a dar una respuesta a la sociedad, que nos está pidiendo un cambio, mayor transparencia y calidad institucional”.
Lena puso de relieve que la reforma “tiene muchas aristas, no es sólo la Boleta Única Papel, que es lo más novedoso. Propone una modernización, es una transformación integral y democrática, basada en los principios de la ciudadanía, la representación, la igualdad, la seguridad en el voto, la paridad de género y la participación de las minorías”, además de crear la Dirección Provincial Electoral, establecer fechas fijas de elecciones y mantener las PASO.
“Hay sectores que proponen diluir los avances, limitar la transparencia y los derechos. Nosotros miramos para adelante. Este proyecto tiene muchísimas modificaciones en relación a lo que mandó el Poder Ejecutivo. Incorporaciones que lo mejoraron”, subrayó.
“Esta es la oportunidad de ser protagonistas de un cambio en la historia. Esperamos muchos este momento. Hemos tomado la decisión correcta y, levantando la mano para votar, no sólo votaremos un proyecto de ley, votaremos por el futuro, para mejorar nuestra democracia y nuestra calidad institucional”, destacó Lena.
Al Senado
El proyecto con media sanción ingresará el jueves al Senado, donde el peronismo tiene mayoría.
Aquí, otra vez, el más claro fue Bahillo: “Si se trata este tema con seriedad no hay tiempo material para sancionarlo en el Senado antes de fin de año”, afirmó, en referencia a lo que todo el mundo dice que es la voluntad de Frigerio.
“No creo que quieran generar una ventaja de oportunidad por la ausencia de un senador del oficialismo. Espero que no sea así. Sería lamentable”, advirtió, en relación a la ausencia del senador peronista Juan Cosso, que se recupera de un accidente.
Si Cosso sigue ausente, se podría repetir la situación que derivó en la aprobación de la adhesión al RIGI, con el desempate de la vicegobernadora Alicia Aluani. Pero la advertencia de Bahillo suena lógica, tratándose de una ley que regula las reglas de juego para el acceso al poder.
Habrá que ver si el tema se habilita para sesiones extraordinarias o queda para el período ordinario del año que viene.
Fuente: Página Política