El congreso provincial que la UCR de Entre Ríos convocó para el 15 de diciembre, en Paraná, tiene como objetivo principal ratificar la política de alianzas que el partido viene manteniendo dentro de Cambiemos.

La atípica fecha para el plenario se explica en lo que todo el mundo político entrerriano toma como un hecho: que el gobernador Gustavo Bordet convocará a elecciones provinciales para el 9 de junio.

Esa fecha supone internas en abril, cierre de listas de candidatos para mitad de febrero, e inscripción de alianzas para fines de enero. Si no se reunía el 15 de diciembre (antes no podía ser porque la nueva conducción radical acaba de asumir y la convocatoria tiene un mínimo de 15 días), el congreso radical debería haber sesionado en la primera quincena de enero.

Con independencia de estas razones institucionales -que entre los partidos de Entre Ríos sólo son realmente importantes para los radicales- el congreso del 15 de diciembre contendrá la última puja interna del año para la definición de autoridades partidarias, que tendrá efectos en el próximo proceso electoral.

Es que, a diferencia de lo ocurrido en otros años, del acuerdo para la renovación de la conducción partidaria que se produjo en octubre quedó afuera el congreso.

Como en octubre, también para la definición de la presidencia del congreso de la UCR se buscará el consenso. Si no se lo alcanza, la definición se producirá por votación.

Interna

¿Importa tanto quién presida el congreso? ¿Qué implicancia tiene de cara al proceso electoral de 2019?

El presidente del congreso será uno de los dos radicales con mayor peso político que, en representación del partido, conformará la mesa de Cambiemos que terminará de definir las formalidades de la integración de la UCR al frente electoral: el acta de constitución; el reglamento que contiene el modo en que se reparten los cargos para el caso de una interna; el piso para minorías.

El otro representante político en esa mesa chica ya tiene nombre: será el nuevo presidente de la UCR, Leandro Arribalzaga, electo por consenso en octubre. En la interna, el intendente de Villa Elisa formaba parte del sector que enfrentó al precandidato a gobernador Atilio Benedetti, líder de la corriente Illia.

La Illia pretende ahora quedarse con la presidencia del congreso, para contar con un dirigente que internamente responda a Benedetti en la mesa chica del armado electoral de Cambiemos. Si lo consiguen por consenso, mejor. De lo contrario habrá que medir fuerzas entre los congresales con una votación.

La integración del congreso expresa un armado autónomo del que se dio para el Comité Provincial, en el que obtuvo más espacio de poder el sector enfrentado a Benedetti y liderado por el diputado Jorge Lacoste y el intendente de Paraná Sergio Varisco.

En la integración de las listas para el congreso partidario, en cambio, no tuvieron tanto peso los intendentes. Y en varios departamentos poseen más representantes la alianza de la Illia con los sectores internos que lideran Fabián Rogel y Gracia Jaroslavsky.

Alianzas locales

En materia de alianzas, el congreso partidario puede producir definiciones importantes para los órdenes locales. Ciudades como Ramírez o Rosario del Tala, donde la UCR fue en alianzas más amplias a las elecciones de 2015. Y para 2019 podría sumarse Colón.

El congreso tiene que definir la política de alianzas, que es una sola para toda la provincia. Pero si en una localidad hay una alianza más amplia que la que autorizó el congreso a nivel provincial, el partido en el orden provincial debe permitir al radicalismo de esa ciudad integrar un frente distinto en el orden local.

Otros temas

El congreso iba a tratar, en principio, sólo el tema de la alianza. Pero luego se incorporó al orden del día el reclamo de la Juventud Radical para que se les fije un porcentaje estable de financiamiento de parte del partido.

Por lo demás, hasta ahora no hubo nadie que planteara rediscutir la decisión del congreso del mes de marzo, cuando se aprobó la conformación de interbloques en la Legislatura. Esto no quiere decir que esté descartado tocar en el congreso de diciembre el tema que causó el sismo más importante dentro de Cambiemos de Entre Ríos desde su conformación en 2015.

Si hubiera voluntad de hacerlo, se lo podría incluir como asunto nuevo o dentro del tema de la política de alianzas. Pero, por lo pronto, no se habló del asunto en la última reunión del Comité y, dentro de los bloques no parece haber voluntad de reunificación.