Horas cruciales. No tanto por la decisión, que cambiaría la dinámica electoral en la provincia, sino porque los tiempos apremian. El adelantamiento de las elecciones en Entre Ríos es un rumor que corre con fuerza, como algo inminente, hace unos días en los despachos más importantes de Casa de Gobierno.
La mayoría de los precandidatos para suceder a Sergio Urribarri perjuran que no tienen la menor idea de cuál será el desenlace. Esa situación los impacienta. Sólo uno de ellos confesó a Página Política cual sería la hoja de ruta: el mandatario sugeriría a Cristina Kirchner adelantar las elecciones en la provincia. El fundamento sería el siguiente: Urribarri le garantizaría un triunfo al kirchnerismo en un complicado mapa electoral en el que se esperan derrotas en Mendoza y Santa Fe.
Algunos dirigentes se entusiasmaron ante Página Política con un cronograma anticipado que sobrevuela en algunas oficinas. Las primarias serían el 24 de mayo y las generales el 26 de julio. Las fechas coincidirían con dos efemérides que invitan a reflotar la mística: la asunción de Néstor Kirchner; y el fallecimiento de Evita.
El otro beneficio para el oficialismo que tendría votar antes de octubre es partir la boleta de la oposición. La elección, al circunscribirse a lo provincial, impide llevar en la papeleta a Mauricio Macri, Ernesto Sanz y Sergio Massa. Este es, en rigor, el argumento que más pesa. El desdoblamiento también resuelve algunos problemas a los opositores, sobre todo tras el acuerdo de la UCR y el PRO. Votar en simultáneo con los comicios nacionales pondría en terapia intensiva, por ejemplo, el acuerdo que cerraron para pelear la intendencia el integrante del Frente Renovador, Armando Saliva, con la radical Cielo Espejo. Otro inconveniente es que los radicales tendrían que pelearle la interna a Mauricio Macri con Ernesto Sanz, un candidato mucho menos taquillero que el jefe de Gobierno. Esta observación se le escapó al presidente del Comité Provincial de La UCR, Fuad Sosa, en una entrevista, este lunes, en FM Litoral.
Lo cierto es que no se sabe nada, todo depende de una sugerencia de Urribarri y el afirmativo de la Presidenta.
La ley electoral vigente (Nº 2988), que data de 1934, establece que en Entre Ríos se votará en simultáneo con las elecciones nacionales o el tercer domingo de marzo. Es decir, el que acaba de pasar. La Ley Castrillón, de mínima, habrá que reformarla para incorporar la obligatoriedad de votar en las internas.
¿Se harán cambios en los articulados referidos a las presentaciones de listas de diputados? En la actualidad cada fórmula debe presentar su nómina de legisladores. El oficialismo no tendría esa traba si finalmente se concreta lo que todos dan por hecho: que Urribarri armará la fórmula y las listas. Esa certeza de unidad no es la que se respira en la nueva alianza UCR – PRO.
