Los radicales de Entre Ríos fueron medidos en su crítica al ex presidente Mauricio Macri por haber sostenido que uno de los próceres de la UCR, Hipólito Yrigoyen, fue uno de los primeros impulsores del populismo en América Latina.
Ni el Comité Provincial, ni el Comité Capital, ni los dirigentes que salieron por su cuenta a sentar posición se acercaron siquiera a lo que le dijo a Macri el presidente de la UCR nacional, Gerardo Morales: “Si querés romper Juntos por el Cambio, lo mejor es decirlo concretamente”.
En un interesante escrito, el presidente de la UCR de Paraná, Ramiro Pereira, se centró en diferenciar conceptualmente los términos populismo y popular.
En la misma línea fue el presidente del Comité Provincial, Jorge Monge, quien además puso de relieve que «el difícil momento argentino nos exige abstenernos de profundizar peleas entre la dirigencia política».
Los dos evitaron cualquier vestigio de crítica en los títulos de sus columnas de opinión.
El ex diputado Fabián Rogel interpretó que en las palabras de Macri hubo “desconocimiento” y que en todo caso fue “desagradecido” con “el partido que, resignando gran parte de su historia, lo llevó a ser presidente”. Fue el que más sintonizó con lo que dijo Morales, aunque con mucho más timidez: “Macri pareciera ser que quiere ocupar el lugar que ocupa la actual vicepresidenta de la Nación, socavando Juntos por el Cambio, como lo hace la vicepresidenta al socavar al presidente que ella eligió”.
Ninguno de los tres dirigentes, de larga trayectoria en la UCR, se aproximó siquiera a una afirmación como la de Morales: “Si tu intención es romper Juntos por el Cambio para buscar un acuerdo con sectores de la extrema derecha antidemocrática, lo mejor es decirlo concretamente”.
Se podrá decir que Pereira (Evolución Radical), Monge (Corriente Illia) y Rogel (Alternativa Radical) tienen algo en común: apoyaron en la interna del año pasado al líder del PRO entrerriano, Rogelio Frigerio. Y se supone que lo seguirán haciendo para 2023.
Pero también el diputado Pedro Galimberti, que le da la interna a Frigerio, fue moderado a la hora de cuestionar a Macri. “El ex presidente se equivoca y pierde de vista la dimensión histórica. El populismo, mal entendido, es tan malo para el país como concebir al Estado como una organización social con lógicas privadas”, dijo. Galimberti tuvo apoyos de macristas no frigeristas en la interna de 2021.
En suma, en Entre Ríos no hay un Morales que desde la UCR le ponga los puntos a Macri. Será porque en esta provincia el ex presidente viene ganando elecciones desde 2015. Incluso en 2019, cuando su gobierno tenía todos los indicadores económicos en contra.
Sin embargo, Macri no tiene desarrollo político en la provincia. Su principal referente es Alfredo De Angeli, que fue el último candidato que puso en una lista, para la reelección del senador en 2019. De Angeli no lidera ninguna agrupación importante en Entre Ríos.
La columna de Pereira es interesante cuando asocia a Macri con Menem y al mayor exponente del neoliberalismo argentino con el populismo. No menciona que Frigerio fue funcionario de ese gobierno.
En algún punto las críticas de Macri a Yrigoyen son saludables, porque ponen sobre la mesa la razón de ser de Juntos por el Cambio.
En 2015, con el nombre de Cambiemos, el pegamento que unía a radicales con macristas era el objetivo de desalojar al kirchnerismo del poder. Hoy el kirchnerismo se va sin que nadie lo ayude. Y en el gobierno de 2015-19, la UCR fue “convidado de piedra”, como les gusta decir a los dirigentes radicales cuando buscan votos entre los afiliados.
Si Macri se va con Javier Milei y forman una fuerza conservadora en lo político y neoliberal en lo económico, al estilo de Jair Bolsonaro, le estaría abriendo la posibilidad a la UCR de volver a sus fuentes socialdemócratas.
Y desde Entre Ríos ese movimiento no implicaría necesariamente una ruptura de JxC, si se toma en cuenta que el macrismo no manda en el partido de Frigerio.
Fuente: Página Política
