Todo estaba cerrado para que este miércoles, al final de la jornada, se haga el anuncio. Consistía en informar la unificación de la fecha de elecciones y, probablemente, la oficialización de la candidatura de Adán Bahl.
El intendente de Paraná se fue de viaje -no de gestión sino de descanso- para al regreso meterse de lleno en la campaña. Bahl se fue con el acuerdo de que los entrerrianos voten autoridades provinciales y nacionales el mismo día. El 13 de agosto (PASO) y el 22 de octubre (generales).
El jefe comunal finalizó sus vacaciones este miércoles. Pero con una decisión que aparece, por estas horas, inquebrantable: no quiere unificar los comicios. Así lo confirmaron a Página Política desde la Municipalidad.
Se desconoce el cambio de parecer. Seguramente las corridas de esta semana y el clima que esto genera.
Gustavo Bordet está volviendo de Rosario, a donde fue convocado para participar de una reunión de la Región Centro, territorio que está mirando Sergio Massa para encontrar allí un compañero de fórmula.
Lo más inquietante de toda esta historia es que lo que ahora pretende Bahl es lo que en los últimos días daban por cierto en Juntos por el Cambio.
Durante todo este tiempo el Gobernador apeló a su especialidad: decirle a cada uno lo que quiere escuchar sin confirmar ni negar nada. En Juntos por el Cambio y el oficialismo decodificaron a Bordet de una manera parcializada en la que pareciera haber pesado la conveniencia.
Fue tal la incertidumbre que cuando mediaba este martes y el valor del dólar carreteaba comenzó a circular una noticia publicada en un medio porteño que daba la noticia sobre la unificación sin demasiados fundamentos.
No pocos dirigentes de Juntos por el Cambio la compartieron para desmentirla. En algunos casos, incluso, con aportes de información tales como que Bordet se reunió hace un par de semanas con el presidente de la Cámara Nacional Electoral, Alberto Dalla Via, para que garantice colaboración en el proceso electoral entrerriano.
Terminales del PRO en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), el lunes, daban por hecho que las elecciones en Entre Ríos serían desdobladas.
Rogelio Frigerio prefiere el desdoblamiento por dos motivos. Primero: es el dirigente más taquillero en la provincia y, en una elección unificada la categoría de gobernador pasa al tercer lugar de importancia para el elector por debajo de la de presidente e intendente. Segundo: separando la elección, se aleja de la interna nacional de Juntos por el Cambio, que crece de manera escandalosa.
Los intendentes del PJ miran encuestas que le devuelven buenos números en un escenario nacional espantoso. Con ese argumento se entusiasmaron con el desdoblamiento, pero el fenómeno de Javier Milei sigue teniendo su peso. La boleta del libertario en el cuarto oscuro modificaría las matemáticas. Un representante de Milei, en cambio, no. Los ejemplos hay que buscarlos en las elecciones de Neuquén y Río Negro.
Lo cierto es que el tiempo de juego llega a su fin. Este jueves se prende la luz roja.
Fuente: Página Política
