La Casa Gris arranca el martes la pulseada salarial con trabajadores estatales y docentes. Para ese día están previstas sendas reuniones con ATE y UPCN, por un lado; con los sindicatos Agmer, UDA, AMET y Sadop, por el otro.
El gobierno arranca con el pie derecho, pagando retroactivo a enero el 8,9% que los sueldos perdieron en 2021. Despeja así el primer punto de cualquier pliego de reivindicaciones sindicales pero además da el primer paso al presentar un esquema de aumentos porcentuales que vayan acompasando la inflación, en marzo, en mayo y en julio.
Para los gremios, sin embargo, es prioridad no dejar en el olvido de la negociación el feroz retroceso de salarios que se dio en el 2020. El año transcurrió en contexto de pandemia, cuarentena y sin posibilidad de sesionar en paritarias. El Estado palió la situación con aumentos del 15% pero al cierre del año la inflación había trepado al 36%.
En otro escenario y envalentonados por los mejores números de las arcas públicas, las organizaciones sindicales quieren discutir “dignidad salarial”, mejoras que superen el debate de la inflación.
Pretenden que no quede en promesa el anuncio del gobernador Gustavo Bordet ante la Asamblea Legislativa: “Quiero expresar una vez más el compromiso de gestión para llegar a acuerdos sustentables, que garanticen no sólo una recuperación del poder adquisitivo de los salarios sino también de un incremento real. Desde muy temprano este año estamos abriendo paritarias para llegar a ese objetivo y a otros beneficios para los trabajadores de la administración pública”, dijo el mandatario entrerriano que hizo notar: “El año pasado sostuve que ningún trabajador iba a cobrar por debajo de la inflación en la provincia de Entre Ríos, y hemos cumplido. Con el último aumento que dimos en el mes de enero hemos equiparado los salarios de la administración pública a la inflación. Y el compromiso para el año en curso es que los salarios puedan ganarle a la inflación para recuperar su poder adquisitivo real”.
Esta mejora real del salario ha sido definida como prioridad por los sindicatos institucionalmente. El 17 de febrero pasado sesionó en Paraná el Consejo Directivo de ATE, junto a los secretarios generales de toda la provincia, ámbito en el que se subrayó la necesidad de atender a los estatales más rezagados que cumplen en su mayoría funciones en Salud, Educación, Copnaf, Comedores, Cultura, Ambiente y reparticiones sin adicionales importantes. Se ilustró la situación con la realidad de trabajadores “con 20 años de antigüedad que no llegan a 60 mil pesos y se jubilan con salarios por debajo de la línea de pobreza”.
La dirigencia mira de reojo, además, las negociaciones del Estado con otros sectores que han acudido en pedido de auxilio, como el campo afectado por la sequía que tuvo respuestas en la Casa Gris.
La recomposición también es primer punto para la agenda de Agmer. El último congreso, el 22 de diciembre pasado, cerró el año con advertencias al dejar aprobado el “no inicio del ciclo lectivo” sin propuesta de mejora de los salarios. Y con el comienzo de la etapa escolar encima, el sindicato docente más importante volvió a citar al Congreso para este viernes, 25, en la ciudad de Colón.
Fuente: Página Política