La Legislatura entrerriana terminará el año con la mayoría de las leyes sancionadas del paquete acordado entre el peronismo y Cambiemos el 22 de noviembre, junto con la aprobación del Presupuesto provincial y en el marco de los acuerdos firmados con la Nación.
Ya obtuvieron sanción definitiva cuatro iniciativas: la limitación de los gastos reservados a la órbita de la Gobernación; la eliminación de Ingresos Brutos para créditos hipotecarios; y las adhesiones a la ley de promoción a las Pymes y a la ley de ART, que se votó sobre tablas en el Senado:
En el trámite más inmediato quedan tres proyectos: La eliminación del impuesto a la herencia que tiene media sanción del Senado y está para votar en la sesión del próximo miércoles de Diputados, junto con la adhesión a la ley de emprendedores.
En el Senado aún está pendiente de tratamiento la ley de participación público privada para la obra pública, con media sanción de Diputados.
Hasta aquí suman siete las iniciativas que obtendrían sanción definitiva antes de que termine 2017. A lo que se suma la ley que ingresó el pasado miércoles el Ejecutivo para reducción progresiva de impuestos, en el marco del Consenso Fiscal firmado con la Nación, que debe recibir aprobación de la Legislatura.
Para 2018
Quedan para el año que viene iniciativas que han sido largamente reclamadas por Cambiemos, como la ley de consorcios camineros; la ley de comunas; y la que reforma la orgánica del Tribunal de Cuentas. El compromiso es sancionarlas en las primeras semanas del próximo período que se inicia el 15 de febrero.
Entre los asuntos centrales que discutirá la Legislatura en 2018 están la ley de narcomenudeo ya en tratamiento; la tan anunciada reforma política que fijará las reglas de juego para la disputa de poder en 2019; y las reformas a la legislación previsional de la provincia, sobre la que oficialistas y opositores han prometido una amplia ronda de consultas.
Prórroga y vacaciones
Diputados votó el pasado miércoles la unión temporal de los períodos legislativos de 2017 y 2018, con una prórroga de las sesiones ordinarias hasta febrero, lo que no significa que la Cámara no se tome vacaciones de verano.
Lo hicieron para contar con mayor flexibilidad en el caso de que se dilate el tratamiento de los temas pendientes o que por alguna razón surja la necesidad de aprobar algunos de los expedientes en tratamiento. Eso no se puede hacer durante las sesiones extraordinarias, cuando sólo se pueden votar proyectos del Ejecutivo.
Con la prórroga, pueden durante el verano sesionar cada quince días. O no. Las sesiones estarán formalmente convocadas, como si se tratara del resto del año. El compromiso es que si se hace necesario, sesionarán.
La posibilidad de sesionar dentro de la prórroga del período que culmina este 15 de diciembre pasa porque en la sesión del 13 no se alcance a votar todo lo que se quiere votar antes de fin de año. En tal caso, los diputados podrían sesionar en la semana entre Navidad y Año Nuevo.
