El reclamo al gobierno de la Red de Organismos de Derechos Humanos (Rodher) para que se intervenga “ante el alarmante incremento de la violencia institucional” no ha tenido la respuesta esperada.
La primera reacción oficial fue la de un subsecretario, Daniel Paduán, a cargo del área de Derechos Humanos, que aseguró que “este gobierno no tolera ni avala la violencia institucional”.
La segunda también estuvo lejos de atender el reclamo. El jefe de la Policía, Gustavo Maslein, fustigó con dureza a los organismos; replicó la voz de quienes exigen por “los derechos humanos de la policía” desconociendo que es la fuerza del Estado, que él representa y conduce, el que puede violar los derechos humanos. Legitimó el accionar de los uniformados y aseguró que si hubo “errores” fueron “juzgados administrativamente” y se aportaron pruebas a la Justicia.
Fue más lejos en su crítica a los organismos de Derechos Humanos. Aseguró que “están apretando” al gobernador Gustavo Bordet y a la ministra de Gobierno, Rosario Romero, para conseguir cargos. Además, los acusó de pretender “instalar la anarquía”.
En entrevista con Radio La Voz (que reproduce el matutino Uno) Maslein dio su primera respuesta: “Me cansan los sectores que le pegan a la Policía por cuestiones ideológicas y que nada tienen que ver con lo que está sucediendo en la sociedad”. “No es verdad que todo sea gatillo fácil o intervenciones ilegales. Quieren mostrar una realidad que no es tal”, aseguró para luego resaltar el trabajo de los integrantes de las fuerzas de seguridad.
Dijo estar abrumado por “la cantidad de chicanas y críticas que recibimos de algunos sectores, que de una forma u otra tratan de vender esto que tienen armado ellos, que existe una policía autoritaria, que no cumple con la Constitución y que comete delitos; nos posicionan como si estuviéramos en el pasado, 45 años atrás, como que somos unos brutos, unos ignorantes”.
Concedió que “se pueden cometer errores, y este año hicimos 6 mil detenciones, y si hubo algo que investigar hacia adentro asumimos esos errores, y en la mayoría de los casos nos sirven para corregir, mejorar, para capacitar de mejor manera a nuestro personal. Pero por los dichos de estos grupos, pareciera que están apretando al Gobernador o la Ministra para crear una oficina de un comité sobre tortura. Al menos por la insistencia que dicen algunas situaciones que no son reales, es como que buscan ese fin”.
Acerca de los DDHH
“Tienen una ideología formada, de reclamar por los Derechos Humanos, y eso está muy bien, pero creo que solamente se acuerdan que están para la persona que comete delitos”, criticó Maslein y dio cuenta de su confusión respecto del concepto de los Derechos Humanos, quién puede violarlos y quién no, e igualó el accionar de la fuerza policial y la violencia del Estado, con la ejerce un delincuente común en la calle.
Es así que cuestionó al Rodher por no ocuparse de “la gente en la calle, las criaturas con hambre” e impugnó que la red no atienda a “los policías que pierden la vida y ni siquiera las condolencias tienen para nuestras viudas ni las familias”. “Se olvidan parece de todo esto. Ellos ven un uniforme y ven fantasmas por todos lados, ven un cartero uniformado y ya les causa pánico”, descalificó el reclamo.
“El fin de ellos es instalar una anarquía, que los delincuentes tomen la calle, creo que eso es lo que ellos quieren instalar y que los delincuentes sigan tomando la vida de las personas”, acusó.
Maslein, por otro lado, adelantó que el personal policial no tiene “nada que ver” con el homicidio de José Luis González, el hombre que había sido detenido por personal de la Comisaría 8va y cuyo cuerpo fue encontrado sin vida en el río Paraná.
Fuente: Página Política
