Los radicales acompañaron en cambio la sanción del Régimen Municipal, el segundo gran proyecto pendiente del período anterior y que integra un paquete de 14 iniciativas que se están tratando sobre tablas desde las 10 en la Cámara de Diputados.
La oposición se quejó porque originalmente se había acordado tratar un grupo de seis iniciativas, entre las que se contaban el Presupuesto, el Régimen Municipal, y la creación de 337 cargos en Vialidad, pero el oficialismo introdujo ocho iniciativas más donde aparece una autorización al Ejecutivo a tomar fondos remanentes de entes descentralizados; las modificaciones al Tribunal Electoral provincial; la Ley de Ministerios; la autorización al Ejecutivo a tomar créditos por 1.500 millones; la creación de la agencia recaudadora; el recupero de tierras fiscales, entre otros.
El diputado socialista, Lisandro Viale, fue el primero que –en nombre del interbloque del Frente Progresista (FP) que integra con la UCR- protestó porque la oposición no tuvo oportunidad de leer la mayoría de los proyectos. Aclaró que no se oponía al tratamiento sobre tablas, que tenía la “voluntad política” de trabajar sobre esos temas, pero que “sería irresponsable votar por si o por no cosas que no conocemos”.
Una posición similar fue la planteada por los diputados del Frente Entrerriano Federal (FEF) y del GEN. No obstante, al momento de tratarse el Presupuesto, sólo el FP votó en contra. Los demás optaron por la abstención, a pesar de que el presidente de la bancada oficialista, Juan Carlos Navarro, aseguró que el proyecto que venía con media sanción del Senado no había sufrido ninguna modificación.
El presidente de la bancada bustista, Fabián Flores le contestó que hoy mismo había tomado estado parlamentario y que si bien entendían las “razones políticas” del Ejecutivo para su aprobación, no había tenido oportunidad de analizarlo cuando ni siquiera han sido formadas las comisiones. Su compañero de bloque, Rubén Almará, planteó algunas dudas, pero cerró su intervención con un deseo, significativo desde lo político, tomando en cuenta que era la primera vez que hablaba: “esperamos tener un diálogo para encontrar los consensos”, dijo el legislador sobre el que, desde antes de las elecciones, se pronostica un pase al oficialismo.
Agustín Federik, como presidente de la bancada radical, hizo sus críticas al Presupuesto, dejando en claro que lo había estudiado con sus asesores. Y allí fue que fundó el voto negativo. En cambio, consideró “irracional” e “irrespetuoso hacia las bancadas minoritarias” al modo en el que el oficialismo bajaba el resto de la agenda del Ejecutivo en la Cámara.
