¿Que tienen como propio Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich en Entre Ríos? La pregunta es de difícil respuesta. Salvo contadas excepciones, el conjunto de la dirigencia provincial del PRO ha optado por mantener la imparcialidad en la interna nacional de su partido.
Más allá de sus preferencias nacionales, la dirigencia entrerriana del PRO se ordena -ante todo- con el postulante a la gobernación. Rogelio Frigerio ha puesto especial cuidado en tratar por igual a todos los referentes nacionales de su partido que, en modo electoral, han visitado la provincia.
Un pronunciamiento en la interna nacional sólo acarrearía complicaciones al armado provincial. A este fin, el escenario ideal para Frigerio serían las elecciones provinciales separadas de las nacionales, de modo que el gobernador entrerriano ya esté electo (septiembre) cuando se tenga que votar presidente (octubre).
La particular posición que ocupa Frigerio en la escena entrerriana, como candidato favorito para suceder a Gustavo Bordet, hace que en Entre Ríos la lógica del armado electoral dentro de JxC se asemeje a la de las provincias donde la coalición es gobierno. En esos distritos, pesa más la palabra del gobernador que la de los dirigentes nacionales.
Frigerio no es gobernador, pero viene encabezando las encuestas hace más de un año. De allí que en Entre Ríos el proceso sea inverso al de otras provincias: aquí son los dirigentes nacionales los que buscan la foto con el dirigente provincial.
Está claro que los presidenciables del PRO (Larreta, Bullrich, Vidal, Macri) no tienen a otro candidato a gobernador dentro de su partido. Pero además, en este caso se trata del favorito dentro de JxC que, por eso mismo, ha conseguido al apoyo de la mayoría de la dirigencia de la UCR, el principal partido de la coalición en la provincia.
Este contexto hace que la creciente interna nacional del PRO entre Larreta y Bullrich no divida aguas en Entre Ríos. Al menos en la superficie.
Algunos casos
Una de las pocas excepciones, dentro de la primera línea de dirigentes del PRO, es la de la diputada y precandidata a intendenta de Paraná, Ayelén Acosta, que se ha mostrado siempre muy cerca de Bullrich y la semana anterior dio muestra de ello al oficiar de anfitriona, junto a Frigerio, en la visita que la postulante a la presidencia hizo a la ciudad de Colón, ubicada en el otro extremo de la provincia.
El esposo de Acosta, Walter Klix, trabaja abiertamente por la candidatura de Bullrich. Pero ambos responden a Frigerio en el orden provincial. La idea es siempre que lo nacional no interfiera en lo provincial, al menos mientras no se unifiquen las elecciones.
En cambio, el competidor interno de Acosta para la intendencia, Emanuel Gainza, sigue los pasos de Frigerio en este punto. Se lleva bien con todos y lo demuestra exhibiendo fotos con los principales referentes nacionales del PRO.
Otro referente histórico de Bullrich es Guillermo Bernaudo, que por años fue la cara visible en Entre Ríos de Unión por la Libertad, el anterior partido de la actual presidenta del PRO. Bernaudo fue número dos del ex ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, un declarado halcón dentro de la interna de JxC, que ha guardado bajo perfil político en los últimos meses.
Pero, sin embargo, Bernaudo es considerado un moderado, que se desempeña como una pieza clave en el armado de los grupos técnicos de Frigerio en su proyecto para gobernar la provincia.
Es un buen ejemplo de cómo las categorías nacionales pocas veces sirven para leer la interna provincial.
Además, en el orden nacional la escena interna se ha mostrado cambiante. Se registraron pases que tocan de cerca a Frigerio. Por ejemplo, en la última visita de Bullrich intervino Sebastián García de Luca, que fuera número dos de Frigerio en el Ministerio del Interior y actualmente es un armador de Bullrich. Lo mismo que Nicolás Massot, ambos vinculados a Emilio Monzó, que se negó a sumarse a las campañas tanto de Larreta como de Bullrich. Todos dirigentes que tienen o tuvieron estrechos vínculos con Frigerio, un moderado que naturalmente se asocia más a Larreta dentro de la interna de JxC.
En todo caso, lo que se puede ver en Entre Ríos es a dirigentes que expresan su cercanía con algún referente nacional. Por ejemplo, el senador nacional Alfredo de Angeli y el diputado Nicolás Mattiauda, que habitualmente comparten posiciones, acompañaron la presentación de los equipos técnicos que Bullrich hizo en junio de 2022.
Pero a ese encuentro concurrió también el ex presidente Mauricio Macri, que en la referencia nacional de De Angeli está antes que Bullrich.
El jefe de la bancada de diputados provinciales del PRO, Esteban Vitor, por ejemplo, mantiene a toda costa su neutralidad, a pesar de haberse mostrado reiteradamente junto a Macri en su rol de presidente del Foro Federal de Legisladores Provinciales del PRO.
Mientras Macri mantenga la intriga sobre sus aspiraciones electorales sigue siendo, ante todo, el fundador del PRO y único dirigente que llegó a la presidencia dentro de ese partido. Eso lo pone en otro lugar dentro de una fuerza en la que a sus integrantes se les sigue llamando “macristas”.
La dinámica de la interna debilita la asociación que se hacía un año atrás entre Macri y Bullrich. Aunque los dos puedan calificarse de halcones y, por caso, muestren coincidencias con Javier Milei, Bullrich no es la candidata de Macri. Al menos por ahora.
Fuente: Página Política
