Mediando la tarde de este miércoles Gustavo Bordet y Sergio Massa se reunieron en el Palacio de Hacienda.
“El ministro y el Gobernador analizaron el impacto de las producciones especiales que involucran a Entre Ríos, como los cítricos dulces, el arroz y el arándano congelado, con el propósito de ser incluidas en esta herramienta de liquidación de exportaciones”, informó el brevísimo parte de prensa enviado por el área de comunicación del funcionario nacional a Página Política. Casi como un pie de la foto que lo acompañaba e ilustra este texto.
Es el segundo encuentro entre Bordet y Massa en menos de 15 días. El anterior se dio el lunes 10 de abril. Fue para anunciar un desembolso de 400 millones de pesos para paliar los efectos de la sequía en la ganadería.
El reloj sigue corriendo mientras buena parte de la dirigencia se debate entre la conveniencia o no de adelantar o unificar las elecciones. Hace una semana Página Política publicó una nota en la que se enumeraban los elementos por los cuáles la balanza se inclinaría en favor de los que quieren unificar. Sin embargo, cada vez que la economía hace ruido -como los movimientos en el dólar- se imponen las voces de quienes no dudan que el cronograma debe desdoblar los comicios. De esa partida, en su mayoría son los intendentes.
Bordet espera de Massa la definición de ser candidato a presidente para unificar, como informó este medio hace unos días:
Los gobernadores electos en Río Negro y Neuquén fueron a entregarle el trofeo al tigrense, no a Alberto Fernández.
Lo cierto es que este miércoles Bordet y Massa se volvieron a ver en el marco de la incertidumbre, a la que un cable de la agenda APF le puso condimento: el cierre del padrón provisorio de electores habilitados para participar en los comicios nacionales se producirá el próximo 25, dos días antes del plazo máximo que tendrá el Gobernador para definir si Entre Ríos votará en forma separada o en conjunto con la Nación.
Adán Bahl, que ha dejado trascender de su boca que es el candidato elegido por Bordet, se tomó unos días de vacaciones. Hace bien, seguramente la campaña será más dura que otras veces para el peronismo.
En el entorno del Gobernador se sigue repitiendo la posibilidad de una “interna ordenada”. Sería con el compromiso del que pierde acompañe.
Sin la integración de las minorías, lo único que se podría ordenar es una lista de diputados y que la competencia sea de fórmulas, como alguna vez se esbozó. De esa manera algunos se sacarían el gusto y los jefes comunales despejan cualquier posibilidad de que les broten competidores en sus territorios y tengan que hacer lugar en las listas de concejales.
Fuente: Página Política